En todos y cada uno de nuestros post le damos mucha importancia al mantenimiento de una buena higiene bucodental como medida de prevención de otras enfermedades dentales como caries, periodontitis entre otras.
Pero… ¿sabemos realmente en qué consiste estas limpiezas profesionales? ¿cada cuánto tiempo es recomendable acudir a nuestro dentista para realizarse una de estas limpiezas…?
No te pierdas el siguiente post, te lo contamos:
A pesar de mantener una óptima limpieza diaria de nuestros dientes a través del cepillado, es importante realizarse al menos una vez al año una limpieza bucodental de la mano de un profesional ya que la principal función de esta limpieza es, como ya advertíamos al principio, la prevención.
Cuando realizamos una limpieza además de eliminar manchas prácticamente lo que se está eliminando es sarro. Y ¿qué es el sarro? El sarro o placa dental no es otra cosa que colonias de bacterias que han sido cubiertas por minerales, por lo que se ha endurecido y adherido con fuerza al diente. Las acumulaciones de sarro pueden formarse con mucha rapidez, y una vez lo han hecho, no desaparecen con el cepillado diario: solo pueden eliminarse mediante una limpieza bucal.
Éste es peligroso ya que es uno de los principales causantes de enfermedades periodontales o pérdidas de piezas dentales.
El procedimiento de una limpieza dental es algo rápido y sencillo y también se trata de un proceso estanderizado.
A través de ultrasonidos, se elimina la placa de la superficie de los dientes, principalmente la parte que está justo debajo de la línea de la encía.
A continuación, elimina los depósitos de sarro que están ligeramente debajo de las encías, o subgingivales.
Cuando ha terminado de eliminar el sarro, en algunas ocasiones, usa un chorro de agua a presión con bicarbonato especial para eliminar las manchas en la superficie de los dientes; pulirá los dientes con una pasta dentífrica especial y finalizará todo el proceso aplicando una fluorización.
Recuerda que una limpieza dental siempre debe realizarse por los profesionales que están autorizados para ello, es decir, dentistas e higienistas dentales titulados y colegiados. Una limpieza poco diestra puede acarrear graves problemas en tus dientes y encías.
